He tenido únicamente dos oportunidades de intentar fotografiar codornices,  en la primera solo les vi la punta de la cola cuando se alejaban a toda velocidad.  En este caso,  contamos con un poquito más de suerte,  ya que al menos se logró verlas,  aunque no fotografiarlas con la calidad deseada.  Es un ave muy arisca,  quizás porque ha sido muy cazada. 
Normalmente se encontraba entre la maleza,  se movía con una habilidad pasmosa para no agitar las ramas ni la hierba.  Enfocarla a esa distancia y con tantos obstáculos fue todo un reto.
Su canto,  bastante particular y relativamente fuerte,  era lo que nos permitía ubicarla
Cuando se movía en terreno abierto era como un vuelo rasante,  esta imagen borrosa es una muestra del espectáculo que contemplamos
Saludos
Excelente Fer, me gusta esta forma de contar la historia. 
Estupenda serie Fernando, muy buen trabajo el realizado, aves que presentan un reto para el fotógrafo. Saludos
Muy buenas, se que son muy veloces, y tambien cazadas 
  todas 
 